Familia crea una solicitud única para Servicios Sociales y Ley de Dependencia
El mismo informe médico, social y valoración económica servirán para todas las ayudas
La implantación de la Ley de Dependencia hace ahora cinco años obligó a encajar las piezas del nuevo puzzle con las de los tradicionales Servicios Sociales, verdaderos veteranos en la prestación de atención y ayuda a mayores y personas con discapacidad, aunque con diferentes criterios.
No siempre han casado perfectamente y, además, han supuesto para los demandantes una doble ventanilla, diferentes informes sociales y médicos y distintas valoraciones de la renta y el patrimonio. Además, el ciudadano que se acercaba a una administración en busca de ayudas no siempre era informado del doble mapa de posibilidades.
La Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades ha dado finalmente el paso y convertirá así, desde hoy mismo, a Castilla y León en la primera comunidad con un acceso único a ambas líneas de actuación. Una sola solicitud, un único informe médico, el mismo parte sociosanitario y también habla en singular para la valoración de la renta del beneficiario que permite determinar su participación.
El avance es considerable para el demandante. El solicitante solo tiene que pedir en Servicios Sociales, o bajar de la web de la Junta (www,jcyl.es) en la que se colgará este mismo lunes, la ‘Solicitud de acceso a los servicios sociales y de valoración de la dependencia’, un documento que además va acompañado de instrucciones y que se ha simplificado considerablemente, según explican la consejera de Familia, Milagros Marcos, y el gerente del área, Jesús Fuertes.
Una única puerta de acceso para el beneficiario y una simplificación que favorece también a la Administración que no tendrá que duplicar papeleo, trabajo y horas.
La unificación no afecta solo al mero papel de la solicitud sino, y es lo fundamental, a los informes.
Un solo certificado médico sirve para ambos caminos y el similar del trabajador social también será único; así como la valoración de la capacidad económica. Es más, si un demandante no es dependiente y solo accede a ayudas de ‘catering’, teleasistencia o a domicilio y con el tiempo, por edad o deterioro, pasa a ser considerado en un nivel de dependencia que recoge la ley, no necesitará volver a pasar por toda la tramitación, solo actualizar los cambios.
Un ciudadano castellano y leonés puede pedir cuanto considere que necesita y a lo que tiene derecho en una sola solicitud sea o no dependiente, y obviamente los Servicios Sociales estudiarán la demanda y si se ajusta a las prestaciones que le pueden corresponder.
Las facilidades llegan además un poco más lejos en cuanto a la ayuda a domicilio o la teleasistencia porque el solicitante no tiene que preocuparse de a quién pide la prestación, si la da un Ayuntamiento o una Diputación, el demandante pide y la Gerencia de Servicios Sociales se encarga de la gestión venga de quien venga.
Un paso que no se ha podido dar todavía en cuanto a las residencias de ancianos por la complejidad de un sector en el que la propia Junta tiene centros, también concertados, además de los ayuntamientos y diputaciones. La lista única en este servicio tendrá que esperar un poco más.
Sanitario y social
Además de esta simplificación, Familia incorpora cambios en busca de mejorar la coordinación social y sanitaria y el seguimiento de las prestaciones y cuidados, fundamentalmente en el entorno doméstico.
El preceptivo informe médico sobre la enfermedad y situación clínica de la persona dependiente seguirá y sin cambios; pero el que recoge la situación socioeconómica que realizaba hasta ahora solo el trabajador social se completará con una parte de cuidados asistenciales, es decir, será sociosanitario.
Así no solo recogerá las condiciones del hogar, la adaptación de baños, la situación de calefacción o agua caliente, de familiares que se van a encargar del beneficiario y el largo etcétera de aspectos que valoran ya estos profesionales sino que enfermería, del mismo centro de salud que hizo el certificado médico, añadirá datos sanitarios sobre los cuidados que precisa, sobre si el cuidador puede curar bien una herida o hacer seguimiento de su medicación, garantizar su movilidad y cambios posturales si están encamados o cualquier otro aspecto sanitario que incida en su bienestar diario.
Además de esta valoración preliminar para pedir prestaciones, una vez concedidas, habrá un seguimiento.
Y para ello, Familia crea la Guía de Cuidados, un sencillo documento que estará siempre accesible en el domicilio del beneficiario y en el que todas las partes –el propio cuidador, responsables sanitarios y trabajador social– irán apuntando datos de interés sobre el mayor o discapacitados, sobre sus cuidados y necesidades o sus dudas. Esta guía establece pautas de cuidados y permite conocer la fiabilidad de los mismos. Es una garantía de calidad en definitiva.
El Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl) de ayer mismo recoge la nueva Orden sobre el procedimiento para reconocer la situación de dependencia que incluye el nuevo informe sociosanitario y la Resolución sobre la simplificación de la solicitud.
Familia ha querido que la entrada en vigor de ambas coincida con la del nuevo baremo estatal para la valoración de la Dependencia que entra en vigor también hoy y que está recogido en el Real Decreto 174/2011.
Fuente : elnortedecastilla.es
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