Los beneficiarios de teleasistencia reciben ya el aviso de la cancelación del servicio
La empresa avanza a los usuarios que tendrán que pagar 20 euros al mes para mantener el dispositivo - La Diputación financiará las alarmas solo en municipios de hasta 20.000 vecinos
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Los casi 600 vigueses que se benefician de este servicio
gratuito han empezado a recibir el aviso de que -en un plazo breve-
deberán devolver sus pulseras y collares de seguimiento.
La única forma
de conservarlos es abonar una tarifa de 20 euros mensuales.
Con las
llamadas de la empresa que realiza el trabajo -Grupo Eulen, cuyo
contrato expiró el 31 de diciembre- se corrobora el fin de un servicio
que se venía prestando en la provincia desde 1998 gracias a un convenio
entre la Diputación y el Imserso.
La primera afrontaba el 36,5% del
coste y el organismo estatal el 63,5% restante.
En noviembre la entidad
dependiente del Ministerio de Sanidad ya avanzó que el presupuesto de
2013 cancelaría las partidas para teleasistencia.
De momento los
usuarios reciben una llamada de la empresa en la que se les adelanta que
acusarán una carta con la fecha de entrega del dispositivo.
Hasta que
eso ocurra la asistencia básica continuará prestándose y las alarmas
permanecerán comunicadas con centralita.
Aunque el contrato con la
compañía haya finalizado podrán seguir usándose en situaciones que lo
requieran.
En el caso de los municipios más pequeños los usuarios
apenas notarán cambios.
Pese a la negativa del Imserso a mantener su
partida, la Diputación ya avanzó a finales de 2012 que asumirá el coste
del servicio solo en los ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes.
El
"baremo" deja fuera a Vigo y Pontevedra y, por un estrecho margen, a
otras villas del entorno, como Vilagarcía (37.903), Cangas (26.121),
Redondela (30.006) o Ponteareas (23.561).
El Concello mantiene en sus
cuentas de 2013 una partida de 18.000 euros para la teleasistencia. El
alcalde, Abel Caballero, ya avanzó que no asumirá los costes de "un
recorte de Rajoy" y, tras conocerse la decisión del Imserso, no dudó en
tacharla de "negligencia en grado máximo cometida por unos desalmados".
El
servicio de teleasistencia nació hace más de una década para permitir a
mayores que superen los 65 años o discapacitados en situación de riesgo
conservar cierta autonomía en su domicilio.
Con ese objetivo los
expertos realizan un seguimiento periódico a distancia, se recuerda a
los usuarios sus citas importantes -visitas al médico, horario de
medicamentos, etc.- o se controla su estado de ánimo.
En casos de
emergencia también disponen de un enlace directo. Si el beneficiario
sufre un accidente doméstico puede solicitar ayuda.
Atención en el hogar
El
servicio que prestan Diputación e Imserso beneficia a 1.143 mayores de
toda la provincia.
Otros organismos, como la Cruz Roja, que realiza un
seguimiento de otros 1.700 vecinos; o la Xunta, a través de la Ley de
Dependencia, brindan una atención similar.
Así mismo entidades locales,
como la Federación de Vecinos "Eduardo Chao" disponen de programas
propios dirigidos a la atención de mayores.
En el marco del plan de
empleo municipal ofrecen un servicio de "atención y ayuda en el hogar"
que presta información y asesoramiento para acceder a prestaciones e
incluso acogida.
En total se emplean en la iniciativa 21 personas,
incluidos trabajadores sociales, encargados de ayuda a domicilio o
administrativos.
Fuente . farodevigo.es/gran-vigo
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