miércoles, 17 de marzo de 2010

GALICIA - 11 LEYES Y 25 PLANES POR DETERMINAR

DEBATE DEL ESTADO DE LA AUTONOMÍA

11 leyes y 25 planes por determinar

El presidente avisa de que la atención a dependientes peligra por falta de ayuda estatal


Una cita de Castelao leída en castellano incendió los escaños nacionalistas
Ayer Feijóo repitió el mismo camino hacia el atril, ya como presidente. Un apunte de contexto: los datos del paro suman ahora 40.000 desempleados más que en aquel último debate sobre política general, 27.000 más de los que el PP heredó al aterrizar en la Xunta. Y, sin embargo, el jefe del Ejecutivo tomó la palabra para huir del catastrofismo de antaño. El Feijóo presidente es capaz de distinguir algunas luces en los negros datos macroeconómicos del pasado. Como su predecesor, se consuela con el mejor comportamiento del empleo en Galicia.

Su estreno como responsable de la Xunta en el debate sobre política general lo aprovechó para anunciar 11 leyes y 25 planes, repasar los resultados de su cacareada austeridad y proponer tres pactos a la oposición: sobre las cajas, el territorio y la demografía. Esta última medida le proporcionó la ovación de la mañana. Y no por el anuncio en sí, sino por reprochar a diputados socialistas que acogieran entre carcajadas el encargo de un estudio para investigar por qué la comunidad pierde población.

Pese a los chascarrillos, el presidente dejó la mano tendida para llegar a acuerdos en estos tres asuntos y al menos en dos de ellos (demografía y territorio) parece que podrá contar con los socialistas. En el tercero, las cajas, le acompañará el BNG.

Aunque los indicadores económicos empeoran los que Galicia registraba a su llegada al poder -o tal vez por eso- su discurso se pareció bastante al de la sesión de investidura. Apenas rindió cuentas sobre el camino andado en once meses. No hubo tiempo para reformas de calado, más allá de vaga filosofía sobre un plan estratégico que pretende potenciar el tejido económico.

Mientras su anunciadísima rebaja del IRPF sigue en el cajón, Feijóo avanzó ayer pequeños beneficios fiscales para dinamizar el mercado inmobiliario (el impuesto de transmisión de las viviendas usadas bajará del 7% al 6%, y la tasa para actos jurídicos documentados se relajará un cuarto de punto en primeras y segundas residencias).

El comercio gallego verá nacer el Plan Ágora con 130 millones de euros y el Diario Oficial de Galicia publicará en un mes las bases de un nuevo concurso eólico para adjudicar 2.300 megavatios y que "primará la inversión y el empleo".

El presidente empleó varios minutos en contar también lo que tiene previsto deshacer. Su programa de adelgazamiento para la Administración prevé suprimir parte de los 63 organismos dependientes del Gobierno, que verá actualizada la ley de la Xunta y su presidente. Mientras desmantela parte de la herencia recibida, Feijóo anuncia algunas agencias nuevas: la de I+D+i, que jubilará a la Fundación para a Sociedade do Coñecemento, y la de carreteras, para coordinar las inversiones en asfalto.

Antes, había retomado el mensaje de los agujeros, sus reproches al Ejecutivo central "por su falta de lealtad a Galicia" en el debate sobre las cajas -donde dejó claro que sólo le sirve como interlocutor Zapatero- y deslizado un mensaje trascendente en política social que afecta directamente a los dependientes que esperan para cobrar. "No podremos mantener el ritmo de aplicación de la Ley de Dependencia si el Gobierno central no cumple y financia al 50% con la Xunta el coste de su aplicación. Faltan 200 millones de euros que debe aportar al Estado".


En el tramo más político de su intervención, reiteró su compromiso con la Galicia global, arremetió contra los localismos -sin que los alcaldes socialistas pudieran escucharle desde la tribuna, ya que llegaron por la tarde- y agradeció la colaboración de los ayuntamientos en la financiación local, la futura Lei do Solo y las Normas do Hábitat. Defendió a capa y espada su polémico decreto del plurilingüismo que parte de "la cordialidad que el idioma vive en las calles" y salpicó su intervención de críticas hacia la subida del IVA.

La defensa de su gestión deja otros compromisos relevantes: la Cidade da Cultura abrirá dos edificios este año y un tercero en 2011, mientras los restantes esperan tiempos mejores, la Red Natura sumará un 4% más de territorio al 11% actual y en 2013 el 100% de la población tendrá acceso a la banda ancha. En medio de tanto plan, Feijóo desplegó un vasto catálogo de citas, de Adolfo Suárez, para copiar su filosofía y "llevar la normalidad de los ciudadanos a la política", de Risco, sobre el mundo que es Galicia, y una tercera, de la célebre Alba de groria, el discurso que Castelao pronunció en Buenos Aires en 1948, la leyó traducida al castellano, lo que incendió los escaños nacionalistas. Para el cierre de sus intervenciones, con la bandera de Galicia todavía en la solapa, abandonó la literatura para calcar el lema del Xacobeo: Ahora es cuándo, Galicia es dónde.

Fuente : elpais.com

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