El Concello vigués dispara el gasto de ayuda en el hogar para atender a los beneficiarios de la ley de dependencia
El departamento de Benestar Social ha elevado en un 70% la partida prevista para el servicio de ayuda en el hogar a fin de atender a las personas a las que la ley de dependencia reconoce este derecho.
De esta forma, el poco más de millón y medio de euros que el Concello destinó en 2009 a esta finalidad se convertirá en 2,55 millones en el año en curso, lo que implica un notable esfuerzo para las arcas municipales.
El incremento de usuarios es todavía mayor que el que pueden dar a entender estas cifras. Se debe a que en el concurso para adjudicar el servicio se hizo cargo la empresa Clece, que percibe 13,75 euros por hora de servicio en el hogar, una cantidad sensiblemente inferior a los 16,57 que cobraba hasta ahora Cruz Roja, anterior concesionario. De esta forma, con el mismo dinero se atiende a más beneficiarios.
En estos momentos el servicio cubre las necesidades que tienen en este campo 636 personas, en su mayoría mujeres y viudas aunque también hay 150 varones. El usuario medio es una mujer mayor, aunque también hay un importante colectivo de discapacitados (90).
Menor edad
La edad media actualmente es de 74 años, con una llamativa bajada de cuatro años desde el ejercicio anterior que también está motivada por la irrupción de la ley de dependencia. La valoración que realizan los servicios de la Xunta obliga al Concello a prestar servicios que en muchos casos afectan a beneficiarios que no son necesariamente personas de edad. No obstante, en el caso de ayuda en el hogar el Gobierno autonómico aporta 8,75 euros por hora, con lo que el resto depende del Concello vigués.
Para realizar el servicio la empresa concesionaria cuenta con una plantilla de 150 auxiliares, seis trabajadores sociales, cuatro administrativos y un responsable. En los casos en que se precisa también dispone de un psicólogo. La plantilla de la Cruz Roja era inferior (noventa auxiliares) ya que se atendía a menos beneficiarios. También lo era la cifra global de actividad: 92.000 horas prestadas en 2008 que el año pasado llegaron a las 138.000.
Según la concejala de Benestar Social, la nacionalista María Méndez, el servicio de ayuda en el hogar cumple una función muy importante ya que evita la entrada en residencias de personas que pueden valerse en sus domicilios con ayuda. Por ello también el Concello organiza actividades de ocio que van a reforzarse a partir de ahora.
Fuente : lavozdegalicia.es
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