Desde su implantación en 2007, la Ley de Autonomía Personal y Atención a las personas en Situación de Dependencia ha tramitado el 90 por ciento de las 2.000 solicitudes presentadas, con un total de 770 personas a las que se les ha asignado algún tipo de ayuda en la ciudad de Melilla.
Esta ley está planteada como un pilar básico del estado del bienestar, junto con la educación, la sanidad y las pensiones, según declaró la directora territorial del Imserso, Francisca Coll.
De hecho, la directora estimó que son las autonomías de Melilla y Ceuta las que tienen un mayor número de valoraciones realizadas en relación a las solicitudes. “Los ciudadanos de estas autonomías son los que menos tiempo tienen que esperar”, declaró.
“La puesta en marcha de la ley ha supuesto para la ciudadanía la entrada en vigor de un nuevo derecho, el de las personas mayores y con discapacidad”, puntualizó Coll.
Aplicación progresiva
Han transcurrido dos años desde que se comenzaran a realizar los primeros reconocimientos y adjudicaciones de los distintos servicios y prestaciones. “En los meses de septiembre y octubre de 2007 se pusieron en marcha los mecanismos para ejercer este nuevo derecho”.
En cuanto al desarrollo de la ley, se ha establecido un calendario “amplio”, con una aplicación “progresiva” respecto a la aplicación de los derechos, que será en el 2015 cuando tengan total aplicación.
“En 2007 comenzó el reconocimiento de los grandes dependientes, durante estos años, se han incorporado los pacientes severos. En los próximos años se continuará contemplando a las personas reconocidas como enfermos o discapacitados moderados”.
Eficacia al valorar
En Melilla, desde la puesta en marcha de la ley, han solicitado en la Dirección Territorial del Imserso más de 2.000 personas, de las cuales un 90 por ciento de las mismas han sido valoradas desde la Unidad de Dependencia.
Según Coll, de las personas ya valoradas, a 770 personas se les ha reconocido el derecho a algún tipo de prestación. “Han recibido o bien servicios o prestaciones de las que están reconocidas”.
Estos servicios pasan por la atención residencial, Centro de Día, teleasistencia, ayuda a domicilio o el reconocimiento del cuidador no profesional o familiar, según Coll.
Cuidador familiar
En Melilla, 431 personas tienen el derecho a la prestación del cuidador familiar, según Coll, que quiso resaltar esta figura. “Queremos hacer un reconocimiento a estas personas cuya labor en las distintas familias ha estado oculta y por la labor que han venido desarrollando”.
La directora territorial destacó que son sobre todo mujeres las que han realizado esta labor “callada”.
Coll quiso recordar también que la citada ley, además de las prestaciones económicas, se centra en los servicios.
“A los apartados económicos habría que sumarles los servicios residenciales que, desde el punto de vista público, bien por servicios territoriales o concertados también se están involucrando con las personas beneficiarias de la ley, como son la Residencia de Mayores o las plazas concertadas en el Gámez Morón para personas con discapacidad intelectual”.
Creación de empleo
La directora territorial concretó que la Ley de Dependencia ha supuesto también la generación de empleo, tanto de manera directa como indirecta. “El ejemplo es la triplicación de trabajadores que se ha producido desde la anterior residencia de mayores situada en general Polavieja a la que funciona actualmente”.
Fuente : elfaroceutamelilla.es
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