Las empresas vinculadas a la tercera edad como potencial económico.
La atención profesional al mayor generaría 3.000 empleos directos
Exigen servicios de calidad y aprovechar el potencial de las personas mayores.
Los expertos piden que no haya más demoras en la ley de dependencia.
El siglo XXI será el siglo de las personas mayores. Y los mayores reclaman su papel en la sociedad, reivindicando un envejecimiento más saludable y más participativo.
Los expertos que ayer lunes debatieron sobre las oportunidades de los servicios vinculados a la tercera edad coincidieron en señalar que se trata de un sector emergente y que genera una gran oportunidad de negocio, aunque es necesaria una mayor colaboración entre el sector público y las empresas privadas.
Los datos son reveladores.
Los últimos estudios demográficos apuntan que en el año 2050 un tercio de la población tendrá más de 65 años. “La mujer, que hasta hace muy pocos años se ha venido ocupando de las personas mayores, ya no va a desempeñar ese papel y habrá que recurrir a la ayuda profesional”, explicó Francesc Artola, director de la residencia de ancianos Azahar del Mediterráneo de Castellón.
Y ahí es cuando se introdujo en el debate la aplicación de la ley de dependencia, aprobada por el Gobierno hace ahora cuatro años. “Hay que reivindicar en todos los foros que se aplique la normativa”, defendió Salvador Cabedo, director de la Universitat per a Majors y moderador del debate.
Todos los ponentes coincidieron en destacar las posibilidades económicas que genera la atención a las personas dependientes.
“El futuro está en la profesionalización y se trata de uno de los pocos sectores que aún en tiempos de crisis está generando empleo”, recordó Artola. Para defender su tesis, el director de la residencia Azahar puso un ejemplo.
“Si las 4.000 plazas existentes en la actualidad en las residencias públicas y privadas de la Comunitat Valenciana estuvieran ocupadas se crearían más de 3.000 puestos de trabajo”, defendió, al tiempo que apeló al copago.
“La gente tiene que saber que estos servicios valen dinero y hay que potenciar fórmulas como la renta vitalicia o la hipoteca a la inversa”.
Perspectivas económicas aparte, los expertos pusieron también sobre la mesa la necesidad de que la persona mayor ocupe un papel activo en la sociedad.
“Se trata de un colectivo que debe participar al máximo y ahí el asociacionismo cumple un papel fundamental”, determinó Andrés Palazón, presidente del Consejo Local de Mayores y responsable de la asociación de jubilados Perpetuo Socorro.
Palazón aportó unas cifras para la reflexión. “En 2003 se contabilizaban en la capital 25 asociaciones de pensionistas. Hoy hay 33 y esta sociedad no puede permitirse el lujo de desaprovechar ese potencial”, concluyó.
Fuente : elperiodicomediterraneo.com/noticias
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