El consejero de Familia e Igualdad de Oportunidades, Cesar Antón, presentó en Salamanca el proyecto de la nueva residencia de personas mayores que se comenzará a construir en una parcela de 13.000 metros cuadrados, cedida por el Ayuntamiento de la ciudad.
El nuevo centro supone un incremento de las plazas residenciales públicas para personas dependientes en la provincia, además de mejorar “sustancialmente” las condiciones de los usuarios.
El nuevo centro dispondrá de 200 plazas residenciales para personas dependientes, dentro del modelo de unidades de convivencia, que posibiliten una atención personalizada e integral de las personas allí atendidas, en consonancia con las previsiones contenidas en la Ley de Servicios Sociales de Castilla y León que entró en vigor el pasado lunes.
Asimismo, contará con 28 plazas de respiro familiar, “solicitadas por las propias familias”, lo que constituye un avance en el compromiso de la Junta de Castilla y León de garantizar este servicio en los centros residenciales de titularidad pública, mediante fórmulas flexibles que van más allá del recurso tradicional de estancias diurnas, como son las estancias nocturnas, de fin de semana o períodos alternos que permitan a las familias compatibilizar su actividad laboral con la atención de calidad a sus mayores.
Para poner en marcha ese nuevo servicio, pionero en la comunidad, destacó Antón, se ampliará la plantilla de atención directa en aproximadamente 60 efectivos. El objetivo, reiteró, pasa por tender hacia la atención personalizada.
17 millones, 32 meses
El edificio, cuya obra tiene un presupuesto de licitación de más de 17 millones de euros y un plazo de ejecución de 32 meses, iniciará su construcción “lo antes posible” a lo largo de 2011 y será “absolutamente vanguardista en diseño y funcionalidad”.
Consta de tres volúmenes claramente diferenciados. El principal, de cuatro plantas, acoge la zona de alojamiento y atención especializada, y en las otras dos piezas, de planta baja, se desarrollan el área de estancias diurnas, la zona administrativa y la zona de servicios.
Estos dos bloques de planta baja delimitan una plaza abierta hacia la calle, configurada como zona de relación y estancia por donde se realizará el acceso principal a la residencia y el acceso al centro de día.
El centro contará con 93 habitaciones dobles con una superficie aproximada de unos 20 metros cuadrados y 22 individuales con unos 18 metros cuadrados de superficie. En cualquier caso, el consejero garantizó que la nueva obra prioriza la intimidad y la independencia de los residentes, además de dotar al edificio de diversas ‘unidades de convivencia’ en las que los ancianos podrán relacionarse.
Los cuatro módulos de que constará la nueva residencia se sitúan en torno a un vestíbulo de planta, orientado a la calle y plaza de acceso, que contiene los distintos elementos de comunicación de la residencia (escaleras y ascensores) así como las salas de estar de planta, los comedores de planta y las salas de actividades ocupacionales. Este espacio comunica visualmente las distintas plantas de habitaciones constituyendo el principal lugar de relación de la residencia con un carácter mas privado que el vestíbulo de planta baja.
El centro de día se ubicará en el extremo oeste del vestíbulo con acceso desde el vestíbulo principal y acceso directo desde la plaza principal. Constará de comedor, sala de estar y sala de actividades ocupacionales, para su utilización por los usuarios de este servicio.
Entre los aspectos del edificio destaca el diseño “estructural flexible y abierto”, ya que carece de pilares interiores en las alas de habitaciones. Además, precisó Antón, cuenta con un certificado de eficiencia energética tipo B, gracias a su diseño, los materiales elegidos, su forma de colocación en obra y la utilización de fuentes de energía renovables, lo que propicia no sólo el ahorro de energía, sino que permite adecuar cada zona del edificio a las necesidades del momento en función de su uso o de su orientación.
Para todo ello se han utilizado instalaciones de última generación tanto en la lavandería como en la cocina donde un equipamiento de última tecnología permitirá, además de atender las necesidades de la residencia, prestar un servicio externo de comidas a otros centros de carácter asistencial existentes en la capital y otro de comidas a domicilio a personas mayores que viven solas.
Según explicó uno de los técnicos que intervino en la redacción del proyecto, Marcos Rico, una de las principales preocupaciones de quienes diseñaron la nueva residencia era la de crear un edificio de volumetría sencilla “para que los residentes puedan orientarse bien en su interior”. Entre estos, había inquietud por saber si el edificio contará con capilla e, incluso, preguntaron al consejero acerca de las condiciones económicas para poder residir en él.
La nueva residencia se une al conjunto de actuaciones realizadas por la Junta de Castilla y León a lo largo de la legislatura, plasmada en el Mapa de Plazas Residenciales aprobado en el marco del Diálogo Social para el período 2008-2015, y que supondrá la creación de casi 4.000 nuevas plazas residenciales en la Comunidad Autónoma, 379 de las cuales corresponden a la provincia de Salamanca, en centros ya finalizados como La Alberca, o esta residencia cuyo proyecto hoy se presenta.
César Antón destacó el alto ratio de plazas residenciales para personas asistidas existente en Salamanca dado que se sitúa casi tres puestos por encima de la media nacional al ofrecer 6.279 plazas para los más de 84.000 mayores que podrían ser potenciales usuarios de las residencias (7,42 plazas por cada mil habitantes).
Fuente : nortecastilla.es
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