La crisis eleva el número de hogares que requieren apoyos
5.000 familias sobreviven gracias a ayudas sociales
Martín rechaza aumentar el copago sobre los servicios asistenciales.
Los servicios sociales municipales son un buen indicador de la evolución de la crisis económica. Los datos facilitados ayer por la Consejería de Bienestar Social revelan que la recesión todavía no ha pasado.
Y es que el número de familias que reclaman ayudas de emergencia para poder subsistir sigue aumentado.
Noemí Martín, consejera de Bienestar Social, explicó ayer que en apenas un año aumentaron en mil las familias que acudieron a los servicios sociales municipales para pedir ayudas.
El número global de beneficiarios pasó de 4.212 hogares en 2008 a 5.005 en 2009.
Pedro Rodríguez, director general de Prestaciones, añadió que por los datos que la consejería recibe de los ayuntamientos el número de familias que requerirá ayuda de emergencia sigue creciendo también este año. De hecho, Bienestar Social destinará em 2010 a estas ayudas algo más de un millón de euros, un 15% más que en 2009.
La consejería facilitó estos datos durante la presentación del plan concertado, una herramienta básica para la financiación de los servicios sociales municipales. El plan contará en 2010 con algo más de 56 millones de euros, financiados muy mayoritariamente por la comunidad autónoma, aunque también por los ayuntamientos, la Administración del Estado y los propios usuarios a través del copago. La consejería aporta 32 millones, lo que supone un aumento del 7% con respecto a 2009.
El plan sirve para costear los servicios sociales básicos, fundamentalmente, la ayuda a domicilio, los servicios de apoyo a personas mayores y dependientes y los programas de prevención de la exclusión social y de las ayudas de emergencia, ya citadas. Martín indicó que las personas atendidas en la red municipal de servicios sociales también aumentan. Fueron 87.800 en 2009, lo que supone el 8% de la población asturiana, frente al 5% del año anterior.
Rodríguez subrayó que el aumento de personas atendidas tiene dos explicaciones. Primera, la ley de dependencia obliga a los servicios sociales municipales ha realizar parte de la tramitación. Y, segunda, y más preocupante, la crisis económica está empujando a un número creciente de familias a reclamar ayudas. Martín reiteró que, precisamente en un contexto de recesión, las políticas sociales resultan más necesarias que nunca.
La consejera hizo hincapié en que lo social no sólo es gasto sino también inversión y recalcó que, gracias a la ley de dependencia, se han creado 489 empleos nuevos sólo en los servicios sociales municipales. La titular de Bienestar terció también en el debate del copago y subrayó que la aportación de las familias en el coste de los servicios sociales es razonable por lo que rechazó la posibilidad de aumentarla.
Fuente : lavozdeasturias.es
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