El tripartito se planta ante Sanidad por los recortes en dependencia
El Govern acusa a la ministra de diluir sus compromisos sobre la ley
A las complejas relaciones entre la Generalitat y el Gobierno central se acaba de añadir otro motivo de discrepancia: la aplicación de la ley de dependencia.
El tripartito ha decidido no apoyar el inminente desarrollo de la norma a la vista del recorte de más de un 5% del dinero destinado a las prestaciones en los presupuestos del Estado para el 2011.
«Cuando accedió al cargo, la ministra Trinidad Jiménez afirmó que la ley de dependencia seria una prioridad, pero con el tiempo este objetivo se ha ido diluyendo», declaró ayer a este diario la consellera de Acció Social, Carme Capdevila, para justificar la decisión del Govern.
La consellera no se mordió la lengua: «Para desplegar esta ley hace falta un presupuesto suficiente y nunca se ha cumplido. Mientras, los ciudadanos piden explicaciones a las comunidades autónomas».
Si no lo arreglan improbables ampliaciones de presupuesto, el choque se concretará en la próxima reu-nión del consejo territorial, en la que participarán el Ministerio de Sanidad y Política Social y las autonomías.
Allí será donde Catalunya, a la vista del tijeretazo y de que en enero tendrán que ser atendidas más personas dependientes -las de grado 1, de dependencia más leve-, se abstendrá en la votación preceptiva sobre la cartera de prestaciones a las que estos dependientes leves tendrán derecho en el 2011 y que en el caso de Catalunya serán más de 30.000 nuevos usuarios.
RIESGO DE SATURACIÓN
Capdevila recuerda que el 5% de recorte podía compensarse con el anuncio de que ya no se pagará la prestación retroactivamente en determinados casos. Pero con la entrada en el sistema del grado 1 de dependientes, la sostenibilidad económica está más que en entredicho, según el Govern.
De hecho, los ayuntamientos llevan meses advirtiendo de que los problemas financieros y burocráticos de las administraciones central y autonómica están provocando una saturación que dificulta una atención correcta a las personas que por ley ya tienen derecho a una prestación o ayuda, y que en cambio ven que la tramitación de su expediente se retrasa y el seguimiento de su evolución se hace de forma muy esporádica.
La pelota está ahora en el tejado ministerial. Para sacar adelante su plan para la dependencia leve (que probablemente incluirá servicios de teleasistencia, atención domiciliaria, cuidadores no profesionales y atención precoz a niños menores de 6 años, entre otros) debe reunir una mayoría de votos favorables. Y a la tradicional posición crítica de las comunidades autónomas gobernadas por el PP se sumará ahora la abstención del Govern.
Fuente : elperiodico.com
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