«El copago es fundamental para hacer sostenible el sistema de bienestar»
Tras 18 años ejerciendo de abogada especializada en Derecho de Familia, una llamada del presidente Francisco Camps en julio de 2007 la sentó en el banco azul del Gobierno, primero como consellera de Turismo y desde verano de 2009 como titular de Bienestar Social.
Casada y madre de cuatro hijos, Angélica Such lidia desde entonces con un departamento de más alcance social que político.
La aplicación de la ley de dependencia es una de las patatas calientes de su departamento ¿Por qué la valenciana ha sido una de las comunidades con más retraso en la tramitación de las ayudas?
Es difícil dar un único por qué. Probablemente las comunidades autónomas como la nuestra que antes de la aplicación de la ley tenían una estructura de servicios sociales fuerte y consolidada les ha sido más complejo articular un sistema que modifica toda la estructura de servicios sociales.
La ley de dependencia se promulga y entra en vigor al día siguiente sin que haya un tiempo para establecer una estructura de gestión. Además, hubo una publicidad, desde mi punto de vista incorrecta, que generó unas expectativas de derecho sin explicar convenientemente cuál era el calendario. Eso hizo que en un primer momento hubiera una avalancha de solicitudes, que había que valorar, que regular e ir congeniando con el sistema que uno ya tenía estructurado.
¿Falla la voluntad política?
No, de ninguna manera. La voluntad de aplicar la ley es inequívoca. Cuando acaba la legislatura y uno hace balance ve una ley nueva, un nuevo pilar del derecho de bienestar que en cuatro años ha supuesto que pasemos de 9.000 personas atendidas a más de 39.000. Y uno mira las cifras y ve que la Generalitat ha invertido 310 millones de euros y el Gobierno central alrededor de cien cuando esta no es la proporción que establece la ley. La voluntad política se ve también en las normas aprobadas para agilizar los trámites. En estos años se ha puesto de manifiesto que había un procedimiento excesivamente largo y que podíamos acortarlo. Y eso es lo que hemos hecho con el decreto aprobado el viernes, una norma que acortará los trámites para las ayudas a seis meses.
¿Cree que si Rajoy llega a la Moncloa mejorará la gestión de la dependencia? ¿Qué se le exigirá desde el Consell?
Mejorará con una correcta financiación del sistema. No está bien financiado, no solo por los porcentajes que no se cumplen, sino por cómo se financia. No se hace en función del recurso que tenga la persona y eso es esencial. Como no hagamos el sistema sostenible es inviable. El PPCV presentó una proposición no de ley en las Corts que votó el PSPV en la que pedíamos una modificación en el modo de financiar el sistema. Estoy convencida de que cuando Rajoy llegue al gobierno acometerá esta modificación del sistema.
¿Ve sostenible el Estado de Bienestar tal como hoy lo conocemos o considera necesario hacer recortes?
A lo largo de todos estos años de democracia hemos llegado a un Estado de Bienestar al que, en mi opinión, no debemos renunciar. Se han conseguido muchos logros, considerados muchos derechos básicos como es desempleo, la sanidad, la educación y el bienestar. A partir de ahí creo que el sistema se tiene que hacer sostenible con nuevos modos de financiación. Aquella persona que no tiene ningún ingreso, o los que tiene no le permite tener cubiertas sus necesidades básicas, la administración pública tiene que cubrirlas. Ahora bien, si tiene ingresos y puede copagar el servicio en la proporción que sea, hay que tender hacia ello. Nosotros estamos trabajando también en ese copago. Y digo trabajando porque soy partidaria de que las normas salgan consensuadas y dentro de la sensatez. Y se está contando con todas las entidades y agentes implicados. No creo que haya que hacer recortes sociales para hacer sostenible el sistema. Hay que hacer sostenible la financiación y el copago es parte fundamental para que el sistema se pueda mantener.
¿Y ve a la sociedad preparada para aceptar fórmulas de copago?
Pienso que sí, que estamos ante una sociedad suficientemente avanzada para poder tener un planteamiento sereno de la situación. Hay ámbitos en el Bienestar Social, como el de los mayores, donde eso ya existe. La persona ya colabora con sus ingresos cuando puede y a todo el mundo le parece normal.
Teniendo en cuenta la situación de penuria de las arcas autonómicas y las dificultades de este verano para pagar algunas residencias de la tercera edad ¿El Consell puede garantizar la cobertura de sus políticas sociales?
La Generalitat garantiza esta cobertura con sus presupuestos. Es cierto que como consecuencia de la crisis ha habido una caída de los ingresos y un incremento de la demanda social motivada por el desempleo que vive el país. Y ello obliga a una mayor atención social. ¿Cómo garantizamos los pagos? Con la distribución de los recursos en los presupuestos y le recuerdo que esta conselleria ha mantenido los suyos. Eso te permite tener la tranquilidad de que lo que hay lo podemos mantener. Si no es momento de crecer, no se crecerá, pero lo que hay y las obligaciones que tenemos que atender, como la dependencia, vamos a poder afrontarlas. Respecto a la referencia que usted hacía de las residencias, quiero dejar claro que la administración puede tener retrasos en los pagos, pero hay que diferenciar eso de los impagos. El verano pasado no pasó nada. La previsión inicial de concierto de plazas residenciales existía, es anual.
Bueno, como mínimo algo de incertidumbre sí se generó entre las familias afectadas.
A mí es lo que más preocupa. Por eso salimos en el primer momento a decir: tranquilidad. Esa incertidumbre no la generó la administración pública. En ningún momento, la conselleria puso en duda la cobertura de estas plazas . Quien generó y se sumó a esa situación de alarma es quien tiene que responder esa pregunta. Nuestra voluntad y esfuerzo es tratar que no haya demora en los pagos, pero insistió hay que diferenciar entre una demora y un impago.
¿Lo ocurrido en el Instituto Valenciano de Atención al Discapacitado obliga a reforzar los controles en las empresas públicas?
El Consell ha actuado con rapidez al llevar el asunto a las fiscalía en el momento en que se detectaron las presuntas irregularidades. Lo ocurrido demuestra que los mecanismos de control interno de la Administración funcionan.
Noticia completa en Fuente : levante-emv.com/comunitat-valenciana
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